PARTE 2. LAS COMUNICACIONES
Dentro de lo que hicimos de manera intencionada fue organizar las
comunicaciones. Algunas imágenes debían posicionarse y sobresalir, otras
reestructurarse; por ejemplo, los afiches llenos de texto fueron desahuciados,
el tono es esencial en la participación ciudadana y la idea era salir con
mensajes cortos y contundentes. El caleño es curioso y mirón por naturaleza.
Pensando en el caleño, salimos con los “chancucos”; después le
pondríamos el nombre de fichas. En
una sola imagen pequeña: obra, resultado, inversión y beneficiarios, hechos
para ser vistos rápidamente y no ser sorprendidos en el intento. Tuvieron éxito
total, los chancucos se volvieron esenciales
para la vida pública de los secretarios, y como ellos mismos lo dijeron “en
momentos de palestra pública qué mejor que tener una ayuda de memoria frente a
la comunidad”. Ahora no solo “despeinamos secretarios”, sino que nos pusimos al
servicio de las secretarías y dependencias y los chancucos fueron esenciales en ese logro.
Para poder llegar a ese reto hice cambios en el equipo y dejé a las
personas en las que deposité mi confianza: Kathe y Johana serían mis aliadas en
la comunicación. Con el tiempo, Kathe se enfocaría en una campaña política y
dedicó sus esfuerzos a diferentes frentes; pero sus comunicados, guiones y su
melodiosa y simpática voz alegraron todos nuestros videos. Por su parte, Johana
desplegó su mejor condición de diseñadora, con su sentimiento de repostera
cocinó, preparó y decoró todos los proyectos que salieron adelante y también
aquellos que se quedaron en el horno. Las fichas, “Alcaldía en tu Barrio” y en
“tu Corregimiento”, el Borondo, Cali Vive Ladera, Ecocamperos, Yo Soy Grande,
la cartilla de Política Pública, la agenda de participación ciudadana, son
algunos de sus aportes a toda la estrategia general.
En julio entró Mario, y reforzó al equipo de manera oportuna y contundente;
él nos trajo rigor, una dinámica amplia y vigorosa en redes sociales; al final,
ya exportábamos servicios a otras dependencias, el solar decatlón fue uno de
esos. Las campañas pasarían por la gestión de comunicaciones y en cierta manera
la oficina empezó a tener un mejor relacionamiento con la ciudadanía en sus
redes, un crecimiento continuo de 7% mensual es prueba de ello; siempre me
imaginé transferirle a la comunidad este aprendizaje, ojalá alguna vez se logre:
enseñarle redes sociales a los nuevos líderes para que hagan pleno control y
veeduría a la gestión de sus gobernantes, desde un punto de vista informativo,
constructivo, ético y hasta estético.
Posteriormente entraría Jorge Echeverri a trabajar el tema de contenidos
de la asesoría, con su capacidad de síntesis, no es fácil tener un abogado y
comunicador social juntos, logró colarse en la vida de muchos ciudadanos para
relatar sus momentos, expectativas y calidad de vida. Pero el tema presupuestal
no nos dejó salir adelante con un par de trabajos que nos habrían ubicado en
mejor perspectiva. Las historias de vida de la ladera se quedaron en el
tintero, más de 15 fantásticos personajes, algunos conocidos, otros por conocer, están esperando pacientemente su
momento de asomarse en una publicación.
Hoy, luego de muchas fichas, pantallazos y juegos de palabras, las
comunicaciones de la asesoría de participación ciudadana tienen un mensaje que
dar claro, limpio y contundente.
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